Suele suceder que sin motivo aparente nuestra energía disminuye, nos sentimos cansados o apáticos, sin motivación alguna ni perspectivas a futuro.
Cuando esto sucede debes poner atención a tu hogar, es probable que este siendo afectado por algún tipo de aflicción y por ese motivo tu energía se está debilitando.
Para detectar el problema, deberás sintonizar con la energía de tu casa. Tómate un tiempo para hacer una revisión, despeja tu mente y comienza a compenetrarte con tu misión que es detectar el problema. Recorre las habitaciones una a una, sobre todo aquella en la que pasas más tiempo.
Busca si hay paredes con agujeros, muebles rotos, objetos rotos como jarrones o adornos de porcelana con fisuras o gritas, estos últimos son bastante perjudiciales. Los cuartos de desahogos sucios o abandonados también perjudican la energía.
Si estas en pareja y sientes que llegan muy cansados y no tienen ganas de pasar un momento íntimo, revisa tu dormitorio. Si la cama está en mal estado, con el somier desgastado o el colchón tiene un resorte roto, o la cabecera está rota, cámbialos lo más pronto posible. Esto simboliza que la relación de pareja se está empezando a deteriorar.
Observa tu hogar y detecta si algunas de estas aflicciones están disminuyendo tu energía.